Buenos días amigos de Alberplast, en esta ocasión les voy a comentar por qué en este momento tenemos tanta demora para ir a ver nuevos trabajos (es decir hacer visitas de presupuesto). Les hablaré con honestidad y espero que esto sirva para despejar las dudas que se han ido generando.
Dicen que las empresas por lo general se parecen bastante a sus dueños, en este caso el fundador de la empresa es mi padre pero yo comencé desde hace mucho tiempo atrás a hacerme cargo de los rumbos que toma la empresa. Siempre mi principal objetivo fue ofrecer calidad por sobre todas las cosas; el hacer más trabajos al mes nunca fue mi objetivo principal.
En estos últimos tiempos he ido generando varios cambios (a mi modo de ver para mejor).
Verán, una de las cosas que amo de Alberplast es que la empresa me permite expresarme a través de los trabajos que realizamos. No es sólo un buen negocio sino una de las cosas que aporta felicidad a mi vida.
En un momento la empresa comenzó a agrandarse con mucha rapidez… más obras conllevan un mayor estrés y un menor tiempo para poder generar ideas innovadoras y creativas, es por eso que empecé a sentir poca satisfacción a nivel personal en mi trabajo ya que para poder cumplir con todo comencé a moverme a una velocidad que no me permitía hacer las cosas que me gustaban de la forma que yo quería.
Las cosas comenzaron a ir mucho más rápido y a perder el toque de autor que a mi entender es fundamental en el trabajo. Había un mayor ingreso pero una menor motivación, más velocidad en la realización de las obras pero trabajos en serie sin alma.
Sumado a eso vino la pandemia, la cual sirvió para aumentar las preocupaciones y reducir aún más el goce que yo tengo por mi trabajo…
Esto me permitió entender que este era el momento de dar un paso hacia atrás, de reducir la velocidad y volver a las raíces… terminar la jornada laboral sintiéndome orgulloso de haber hecho un trabajo increíble, el mejor trabajo que con mis capacidades puedo hacer. Un trabajo con la impronta de alguien que ama lo que hace, un trabajo de autor.
Para poder enfocarnos al máximo en esto estamos poniendo toda nuestra energía en las obras que se tomaron y que estamos realizando, esto implica que debamos reducir momentáneamente la cantidad de visitas que hacemos al mes.
Como contamos con más demora de la usual para hacer visitas a domicilio lo que estamos haciendo en estos momentos es anotar a todas las personas interesadas en una lista de espera para llamarlas a medida que demos nuevos turnos.
Gracias a todas las personas que siguen confiando en mí y en mi empresa en este momento estamos con mucho, mucho trabajo. Esto es sin duda una cuestión de orgullo y de agradecimiento para mí, únicamente lamento profundamente el no poder dar abasto con la gran demanda que tenemos pero en este momento es la fórmula que he encontrado para poder hacer aquello que amo y mantener la calidad de nuestros trabajos en lo más alto.
Finalmente sólo puedo disculparme por no comentar estos asuntos antes y rogarles paciencia a todos aquellos que confían en nosotros para llevar a cabo sus proyectos.
El mayor de los agradecimientos hacia todos ustedes,
Alberto