Cliente : Necesito un piso de madera de excelente calidad con un color claro. Me hablaron algo de que el roble es bueno, verdad? o quizás uno de pinotea, dicen que es muy bueno… ¡ah! y algo más, estoy buscando algo más bien barato…
Aunque escrito de esta manera suena raro este tipo de comentarios y preguntas han llegado a mis oídos una infinidad de veces. Por alguna extraña razón (calculo que será por desconocimiento) a veces las personas tienen sobreentendido que el término «madera de buena calidad» (roble, pinotea, lapacho, caldén, etc.) puede ser unido de alguna forma mágica a la palabra «barato».
Al escuchar este tipo de expresiones rápidamente doy por sentado que mi interlocutor tiene una idea distorsionada de lo que son los pisos de madera de buena calidad e inmediatamente comienzo con una tranquila y explicativa conversación sobre en qué consiste un piso de madera de buena calidad y de que estos si hay algo que no son es «barato».
Por alguna razón que me es más extraordinaria de comprender que la primera aquellas personas tienden a enojarse con esto e insinúan que estoy tratando de aprovecharme de ellas o que es una ridiculez que un piso de madera de buena calidad pueda ser tan costoso.
Alejándome en esta oportunidad de estas situaciones raras y conflictivas intentaré de la forma más explicativa posible dar mi opinión en este asunto y darles un vistazo al rubro de los trabajadores de la madera.
En principio querido lector le cuento que las maderas se separan en varios tipos dependiendo de distintos criterios. Separándolas por sus cualidades más notorias y extendidas diremos que cuanto más estable, grande, con mejores cualidades estéticas (color, veta, etc.) y/o más fácil de trabajar sea más costoso será el piso de madera, tabla o pieza de madera en cuestión.
Por otro lado cuanto más inestable, pequeña, deslucida y/o difícil de trabajar sea (extremadamente dura, maderas muy fibrosas, etc.) más económica será.
Este simple planteo nos puede dar un muy buen panorama de en qué se diferencian las maderas costosas de las económicas y si bien algunas veces estas definiciones se entrecruzan por lo general sientan las bases de todo lo referente a los trabajos en madera.
Ahora bien, voy a enfocarme directamente en lo que es mi oficio (que es el trabajo sobre los pisos de madera); enfocándome en distintas características de la madera para explicar este tema.
Estabilidad:
Los pisos de madera están conformados por muchas tablas de madera entrelazadas o puestas unas junto a otras. Todas estas tablas o «piezas» que conforman el piso sufren trabajos (se dilatan y/o se contraen) haciendo que el piso «trabaje» en su conjunto.
Es por esto que las maderas que son usadas para los pisos de madera deben de ser estables (o por lo menos lo más estables posible) para evitar inconvenientes.
Este primer punto ya nos empieza a marcar el por qué los pisos de madera son costosos.
Para que el concepto quede aun más claro les doy un ejemplo:
Pensemos en un piso de madera de unos 50 m2 (el cual obviamente está conformado por muchas tablas o «piezas»). Supongamos que cada pieza de madera tuviera una dilatación y/o contracción de 3 décimas; la suma de todos estos «trabajos» daría como resultado final sobre la totalidad del piso una expansión y/o contracción notable.
Cuanto mayor sea esta expansión y/o contracción por lo poco estable de la madera con que fue hecho el piso más complicaciones nos dará ( por ejemplo provocando que se abran juntas muy grandes que afeen el piso o que el piso se empiece a acucharar al no tener suficiente libertad de movimiento).
Tamaño:
Por lo general los pisos de madera son hechos de tablas/piezas grandes para que se luzca. Cuanto más grande sea la tabla mayor será su costo. Por eso un parquet es mucho más económico que un entablonado.
Los pisos de madera vienen en varios tamaños y cada persona elegirá determinado tipo de piso (damero, lamparquet, parquet, entablonado, etc) de acuerdo a sus gustos y necesidades.
Sólo quiero enfatizar que cuanto más grande la medida mayor será el precio y este incremento no está directamente ligado a la cantidad de madera usada para hacer la pieza sino que está ligada más bien a otros factores (que no vienen al caso comentar ahora).
Estética:
También los pisos de madera deben de tener un gran atractivo estético ya que nadie vería hermoso un piso hecho de una madera tipo cajón de manzanas blanca y prácticamente sin vetas.
Cuanto más bella y pareja sea la veta de la madera y mejor sean sus encastres más costosa será.
Por eso podemos encontrar por ejemplo un piso de eucalipto rostrata de 1º calidad, 2º calidad o estándar y tercera calidad.
Dificultad de maquinado:
Una cualidad más de estos pisos es que si la madera es muy fibrosa o complicada de trabajar (maquinar) sería un desastre para los aserraderos que producen pisos de madera ya que tendrían mucho desperdicio, dado que las tablas se desgarrarían constantemente.
Una madera que se vaya a usar para un piso debe de ser relativamente sencilla de trabajar / maquinar.
Entonces pasando en limpio:
Las maderas para pisos de buena calidad deben de ser:
- Estables
- De un buen tamaño
- Poseedoras de grandes cualidades estéticas
- Fáciles de trabajar
Ya casi terminamos querido lector, sólo le ruego un poco más de paciencia…
Entonces, si partimos de la base de que la materia prima con la que se hacen los pisos de madera de buena calidad son costosas podemos asumir que todo lo que sigue después de esto es costoso también ya que un buen profesional tarda mucho tiempo en formarse (en nuestro caso 2 generaciones) y este profesional también debe de trabajar con materiales de buena calidad y herramientas que sean adecuadas y buenas (y por lo tanto costosas).
Por ejemplo uno no puede cortar un piso de pinotea con una hoja de sierra circular desafilada o pulir este tipo de pisos con una máquina desvencijada ya que de hacerlo así estropearemos una madera costosa sin ningún sentido.
Al haber llegado a este punto notaremos que los pisos de madera no pueden ser económicos ya que todas las partes que forman el obtener un piso de madera bien terminado -es decir desde la materia prima hasta el profesional que lo instala y le da la terminación- son costosas. Entiéndase «costoso» y no «caro», ambos son conceptos diferentes.
La idea principal que me gustaría exponer -al margen de todo lo que he escrito- es que a la hora de querer que nuestro hogar luzca un hermoso piso de madera debemos tener en cuenta que este no va a ser barato (por todo lo mencionado anteriormente).
Teniendo esta premisa en mente (y a rigor de la verdad) se debe de desconfiar de los pisos cuyo costo nos resulte extremadamente económicos ya que puede que en vez de darnos cualidades únicas de calidez, hermosura y practicidad sin igual nos pueda estar trayendo un problema sin fin.
Alberto
IMPORTANTE: Hasta nuevo aviso no contestaremos más preguntas de la sección «Consejos Útiles». Para saber el por qué los invitamos a leer la siguiente nota haciendo click ACA