Antiguamente era muy común que los pisos de madera (principalmente de pinotea) se colocaran sobre tirantes y pilotines que hacían que el piso no se apoyara directamente sobre el suelo, sino que quedara suspendido sobre los tirantes.
Este espacio que se forma entre el suelo y el piso de madera es la tan famosa «cámara de aire».
En esta nota vamos a hablar sobre todas las partes que conforman una cámara de aire.
Lo más habitual es que la cámara tenga 20, 30 ó 40 cm de altura pero podemos encontrar cámaras más chicas o mucho más grandes que eso. Por eso no todas las cámaras van a tener todos los componentes que mencionamos a continuación:
Pilotines
Aunque los llamemos así en realidad no van enterrados en el suelo, sino que se colocan encima de este. Son columnas, generalmente hechas de ladrillos y cemento, que se ponen como base para soportar el peso de la tirantería.
Tirantes
Originalmente lo más habitual era usar tirantes de pinotea. En la actualidad lo normal es usar madera de saligna, pero también hay casos donde se usa otro tipo de madera o material, como por ejemplo hierro.
En las construcciones clásicas los pisos de madera se clavaban directamente a la tirantería.
Estos, junto con los pilotines, conforman la estructura que sostendrá al piso de madera, así que es importante que estén bien dimensionados.
Fenólico
Esto es algo que sólo vemos en las cámaras más nuevas.
Luego de colocada la tirantería, en vez de clavar el piso de madera se clavan fenólicos sobre toda la superficie del ambiente. El fenólico ayuda a distribuir mejor el peso y nos permite colocar encima cualquier piso de madera, sin vernos limitados por el largo o el espesor de las tablas.
Rejillas de ventilación
El objetivo de una cámara de aire es que el aire circule fácilmente dentro de esta para que haya la menor cantidad de humedad posible y el piso no tenga problemas. Esto se logra con las rejillas de ventilación.
Se abren huecos en las paredes de los ambientes donde está la cámara de aire y luego se coloca el tipo de rejilla adecuada para que el aire pueda salir y entrar, es decir, para que el aire se renueve.
La ubicación y cantidad de rejillas depende de cada caso en particular. Es importante tener en cuenta que siempre se instalan en las paredes, nunca encima del piso.
Tuberías de ventilación
Si bien en el pasado las rejillas eran más que suficientes para evitar que se juntara aire húmedo en la cámara, hoy en día han cambiado muchas cosas y a veces estas por sí solas no son suficientes.
Es por eso que cuando el piso lo requiere y es factible se colocan además tuberías de ventilación.
Los tubos se colocan de forma estratégica dentro de la cámara para forzar al aire a circular de forma más eficiente por la totalidad de la cámara y salen al exterior en altura para generar un mayor flujo de aire.
Puerta de inspección
Se utilizan tablas del piso para hacer una pequeña tapa o puerta que sirve para acceder a la cámara de aire o poder ver dentro de esta.
No todas las cámaras tienen una puerta de inspección y si bien no es algo imprescindible sí es muy útil.